Cuatro grandes películas de acción en HBO Max
La Alemania nazi, la caída de Sukarno, la invasión japonesa a China, el mundo del foot-ball americano en los 80: todas excusas para que la acción física se haga cargo de la historia en estos cuatro clásicos enormes. Videos.
Doce del patíbulo
Doce del patíbulo es el "Escuadrón suicida" original: doce condenados a muerte enviados a una misión imposible contra los nazis. El realizador Robert Aldrich deja de lado cualquier sentimentalismo, cualquier atajo de la historia para contar cómo el heroísmo y el valor no son innatos, sino productos de las más feroces circunstancias. Además, la película que terminó de poner en el mapa a Charles Bronson y a un genial John Cassavetes. El elenco incluye a Lee Marvin y Telly Savallas, el segundo como uno de los personajes más pulsionales y peligrosos del cine de Aldrich, un maestro de la crueldad directa.
El año que vivimos en peligro
Con mucho rigor histórico, Peter Weir narra la caída de Sukarno en los sesenta a través de los ojos de un periodista (enorme trabajo de Mel Gibson), de su intérprete (Linda Hunt) y de la mujer de la que se enamora (Sigourney Weaver). Es mucho más que un filme histórico o político porque a Weir le importa más la trama de manipulaciones que lleva a la creación de algo nuevo (en este caso el amor entre la pareja protagónica) que la política. De todos modos, una película reveladora en más de un sentido.
El Imperio del Sol
La novela autobiográfica de J. G. Ballard es tomada por Steven Spielberg para narrar una de sus mejores obras de aventuras, una en la que un niño se inicia a la adultez tras separarse de sus padres cuando la invasión de China por los japoneses durante la Segunda Guerra Mundial. No solo es el gran debut de Christian Bale en el cine, sino un recorrido de ojos maravillados por tragedias que se vuelven etapas del crecimiento. Y quizás la película con mejores tomas poéticas de la carrera de Spielberg.
El último boy-scout
La conjunción de un guión perfecto del sarcástico Shane Black, de un Bruce Willis en estado de gracia y el pico de su trabajo como héroe de acción, y de un Tony Scott decidido a tirar por la ventana cualquier verosimilitud en pos del placer del relato y la imagen hacen de este filme una lección de cine de acción. Un detective en la mala (arrastrando a su hija de diez años a pesar de él) y un jugador de foot-ball americano en desgracia investigan una trama de apuestas, mafias y drogas. Pero es mucho más que eso.