Balance 2020: Los liderazgos mundiales se pusieron a prueba con la pandemia como forzado eje común
El coronavirus marcó un sube y baja para la dirigencia política a nivel global

Por Hector Medina
El 2020 será sin dudas un año que no se olvidará fácilmente. Los cinco líderes mundiales que son citados en esta página son muestra cabal de ello. El derrotero de la pandemia incidió en la trayectoria de cada uno de ellos, marcando sus caminos políticos en formas que sin duda dejarán más de una lección a futuro.
Como cada año en que elige presidente, la campaña electoral en Estados Unidos fue el centro de atención y monopolizó los titulares de los medios del mundo.
En ese marco, la interna demócrata (era número puesto en el bando republicano que el presidente Donald Trump iría por su reelección), después de un trayecto en el que el senador Bernie Sanders encabezó la pulseada, entronizó como candidato el ex vicepresidente de Barack Obama, Joe Biden. Desde un primer momento, Biden fue el contrapunto perfecto para el mediático ocupante de la Casa Blanca: moderado, con constantes llamados de atención sobre la importancia de tomar medidas preventivas contra el coronavirus y una ambiciosa propuesta para "la reconstrucción de la economía", el ex vicepresidente fue ganando terreno en las encuestas a paso firme, hasta terminar quedándose con la elección.
Y he aquí el turno del segundo protagonista de esta nota: el mediático empresario inmobiliario, exitoso conductor de reality show y actual ocupante del sillón principal en la Casa Blanca: sí, Donald Trump. El mismo que se encaminaba prácticamente sin obstáculos hacia su reelección, de la mano del período de crecimiento de la economía estadounidense más largo de la historia, y un marketing personal agresivo y omnipresente en medios y redes sociales. Hasta que la aparición de la pandemia, su pésimo manejo de la cuestión sanitaria con una cifra de muertos que no para de crecer, pero sobre todo una caída de la actividad inédita y la consiguiente crisis económica y laboral, le torcieron el brazo y lo llevaron a una derrota que aún no reconoció.
Para la canciller alemana Angela Merkel, la aparición de la pandemia y su manejo de la crisis sanitaria y económica significó una recuperación de su imagen pública, y una reivindicación de su papel histórico en su anunciado último tramo de gestión al frente del Estado alemán.
Algo parecido, aunque con un horizonte todavía muy incierto, ocurrió con el presidente brasileño, Jair Bolsonaro, quien a pesar de haber ninguneado el coronavirus (postura que mantiene aún) y con cifras de mortandad que ubican al país entre los que más victimas tienen a nivel mundial, ha visto crecer su popularidad. Algo que los analistas fundan en los planes de asistencia directa a empresas y desempleados que, a pesar de contrariar los deseos de su superministro de economía y Chicago Boy, Paulo Guedes, ayudaron a que la economía brasileña tuviera una caída menor a la pronosticada.
Por último, la primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern, a quien su adecuado manejo del coronavirus (su país es uno de los que menos muertos y enfermos de covid tiene) catapultó a la consideración mundial. Cinco líderes, cinco trayectorias que el 2020 marcó a fuego.