El empresario que trajo los termos Stanley, trae la novedad en juguetes sexuales
Facundo Mendizábal se especializa en olfatear buenos negocios. Trajo20.000 sex toys de Womanizer y apuesta a venderlos en seis meses, quiere que puedan comprarse hasta en cadenas de electrodomésticos. Cuestan entre $16.000 y $37.000

Por Graciela Moreno
Saber detectar tendencias es la clave de muchos negocios. Se necesita sensibilidad, mucha curiosidad y un sentido de alerta para estar atento y poder captar, lo que para otros, no es importante. Facundo Mendizábal, fue a quien se le ocurrió convertirse en el representante e importador de los termos Stanley, que luego se convirtieron en furor. Hace varios años que se dedica a descubrir necesidades insatisfechas. Ahora decidió entrar al segmento de juguetes sexuales para mujeres y trajo al país los productos Womanizer.
Heredó la pasión por los negocios de sus padres, su madre trajo hace años, la marca Avent a la Argentina. Mendizábal contó a BAE Negocios: “Desde la empresa Parallel, traje cochecitos de McLaren, productos de Unilever como Pears que son jabones de glicerina y la crema humectante Dove. Hace siete años, me convertí en el representante del termo Stanley para Argentina. Los convencí y en febrero lanzamos el mate Stanley, fabricado en China. Es muy fuerte el posicionamiento de Stanley en la Argentina”.
Logró convencerlos en 2013 para que lo dejen representar la marca, Stanley confió y el resultado fue que Argentina se convirtió en uno de los principales mercados del mundo. Y luego fue por más e “inventó” el mate Stanley. “Buscamos revalorizar el ritual del mate, sentir orgullo por tomar mate. Fue super novedoso, es la primera vez que una compañía hace un mate con identidad de marca. Es un mate con paredes térmicas que permite que no se enfríe la yerba. Uno puede dejar de tomar, volver y seguir usándolo. Desde que lo lanzamos ya vendimos 20.000 mates”, señaló Mendizabal. Sedujo de tal forma a los fanáticos del mate que sin dudarlo, compran el termo a un precio más alto que el que se consigue en Estados Unidos. Confirma un dato imprescindible: el agua para el mate dura 8 horas en un termo Stanley.
Cómo se hace para mágicamente imponer una moda: “Me dedico a identificar necesidades o productos, posicionarlos y distribuirlos. Me interesa leer lo que esta pasando en el inconsciente colectivo, leer tendencias de lo que ocurre a nivel social. Es observación y análisis de lo que pasa en la sociedad a nivel local y global. Lo traduzco y veo que va a ser necesario para lo que está pasando y lo que vendrá”, contó.
Atento a todo, ahora decidió que es el momento de traer juguetes sexuales y creó otra empresa Nexiv. Mendizábal explicó: ”Es un momento de empoderamiento femenino y de empezar a pensar la sexualidad como parte del bienestar corporal, psíquico y mental. En este contexto quisimos ser representantes para Argentina, Uruguay y Paraguay de Wowtech, una empresa líder alemana/canadiense, la primera marca que trajimos es Womanizer, el primer estimulador para mujeres. El grupo tiene varias marcas de productos relacionados con juguetes sexuales. We Vive tiene un espectro más amplio y abarca hombres. Pjur es una marca de cosmética que tiene lubricantes y detergentes para lavar los juguetes y esta Romp con un posicionamiento más juvenil en colores y precios”.
Facundo Mendizábal invirtió USD 100.000 dólares en este nuevo negocio del placer. “Los productos de Woomanizer cuestan entre $16.000 y $37.000 cada uno. Importé un total de 20.000 productos y mi objetivo es venderlos a todos en seis meses. Comenzamos con venta online y en algunas casas de juguetes eróticos, pero mi idea es desde tener un corner en un shopping hasta lograr que lo vendan desde cadenas de farmacias hasta las principales cadenas de electrodomésticos del país. No debe ser más un tema tabú, no puede ser que haya que ir al fondo de una galería para comprarlo”. En el arranque las dos hijas de Marcelo Tinelli, Micaela y Candelaria subieron sus estimuladores Womanizer a sus cuentas de Instagram.
Sabe que no será fácil posicionarlos pero no le teme a los desafíos. Aunque confiesa: “Sé que no es lo mismo darle un like a un termo que a un juguete sexual”. No le teme a los desafíos, hasta exportó carne a China. Busco campos y puso ganado y en otros comida para alimentarlos, trajo expertos de afuera, hizo de todo. Pero no funcionó: “La carne Argentina no es bien vista, salvo la de la cuota Hilton. Entré y me jugué fuerte en un negocio que no conocía. Pero así es la vida, detrás de una historia de éxito, también hay fracasos”.
Además de este nuevo desafío, proyecta lanzar nuevos productos para hacer más grata la experiencia de tomar mate. Y contó que desde que arrancó la pandemia, la venta de termos Stanley se multiplicó por 10 en el canal online. Confía que con Womanizer, podrá hacer lo mismo.