En un escenario de presión inflacionaria e incertidumbre, crece el reclamo de un Salario Básico Universal
El tema se coló en la sesión de este martes en la Cámara de Diputados. Mientras un sector del oficialismo presiona para que se debata el proyecto lo antes posible, algunos empujan para que el presidente Alberto Fernández implemente la medida a través de un DNU.

Por Gabriela Vulcano
La sesión de este martes en la Cámara de Diputados, que tiene por objeto tratar un puñado de proyectos de consenso, dejó a la vista otro tema que cobra cada vez más fuerza dentro del oficialismo. El Salario Básico Universal pasó de ser un reclamo que surgió en las entrañas de las organizaciones sociales a convertirse en un proyecto que cuenta con el apoyo de una gran parte del Frente de Todos, en especial tras la mención que realizó la vicepresidenta, Cristina Kirchner, durante el acto en Ensenada el fin de semana pasado. Aún así resta terminar de cerrar filas puertas adentro y construir las mayorías necesarias en el terreno parlamentario para que la iniciativa sea ley, aunque más de uno se ilusiona con que salga por decreto.
Cuando la mayoría de los legisladores estaban en sus bancas, el diputado oficialista Federico Fagioli se encargó personalmente de repartir a sus compañeros de bloque los cartelitos con la leyenda " Salario Básico Universal ¡Ya!". Algunos de ellos no dudaron en subir fotos a sus cuentas de Twitter con ese pedido. Otros tardaron en pegar las papeletas. En un sector importante del oficialismo el debate ya estaba saldado.
Casi al mismo tiempo que empezaron a sonar los teléfonos de los principales dirigentes del Frente de Todos por la abrupta renuncia de Martín Guzmán al ministerio de Economía, en los movimientos sociales -no todos- celebraban una frase tan cortita como contundente del discurso de Cristina Kirchner. "Creo que tenemos que empezar a discutir la necesidad de un Ingreso Universal Básico", dijo el sábado último la titular del Senado ante varios referentes de La Cámpora, como el diputado Máximo Kirchner; el ministro del Interior, Eduardo "Wado" de Pedro; el ministro de Desarrollo Social bonaerense, Andrés Larroque; la titular de la Anses, Fernanda Raverta; y la intendenta de Quilmes, Mayra Mendoza. Hasta ese momento, no todos dentro de esa organización estaban del todo seguros de que era la mejor herramienta para reemplazar los planes sociales, pero sobre todo para restarle poder al Movimiento Evita, que conduce Emilio Pérsico.
"El apoyo de Cristina es clave, importantísimo. Puso el tema en el centro del debate, envió un mensaje al kirchnerismo y abrió la posibilidad a que se discuta", dijo a BAE Negocios un diputado que promueve con fuerza el Salario Básico Universal. Son varios los que desde un comienzo en el oficialismo se entusiasmaron con el tema, más allá de los legisladores del Frente Patria Grande -Fagioli, Itai Hagman y Natalia Zaracho-, que presentaron el proyecto a mediados de mayo pasado. Daniel Arroyo, Juan Carlos Alderete y el jefe de la bancada del Frente de Todos, Germán Martínez, brindaron su respaldo a la iniciativa. Del mismo modo lo hicieron Leonardo Grosso y Eduardo Toniolli, del Movimiento Evita.
Así como no todos están convencidos en las organizaciones sociales de ir detrás del Salario Básico Universal, tampoco hay un total consenso en el Congreso ni en la Casa Rosada de avanzar con este asunto. El presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, es uno de los que no acuerda con esta iniciativa y en su lugar prefiere discutir un proyecto para pasar de los planes sociales al trabajo formal, en línea con lo que vienen planteando los gobernadores. En el Ejecutivo nacional, Guzmán expresó más de una vez su rechazo, mientras el ministro de Desarrollo Social, Juan Zabaleta, se mostró proclive a dar el debate.
La gran incógnita por estas horas es qué postura adoptará la flamante titular de la cartera económica, Silvina Batakis, quien hasta ahora se limitó a decir que "es necesario discutir estos temas".
“Querida Silvina Batakis te banco fuerte pero no te felicito; eso de andar felicitando designaciones no me cabe; me reservo las felicitaciones para cuando implementes el Salario Básico Universal. ¡Cazá la birome y no te demores por favor!”, dijo Juan Grabois, líder del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE), a la espera de que la funcionaria dé una señal favorable para iniciar el tratamiento del proyecto en el Parlamento. Para eso antes el propio presidente Alberto Fernández deberá dar el visto bueno.
Sin embargo, son muchos los que se preguntan dentro del bloque oficialista hasta qué punto la oposición acompañará el proyecto en un escenario de tanta debilidad del Gobierno. En caso de no lograr las mayorías necesarias, la única alternativa que barajan algunos para poner en marcha el Salario Básico Universal es que el mandatario lo implemente por decreto, como Cristina Kirchner hizo en su momento con la Asignación Universal por Hijo.