Curas en Opción por los Pobres salieron a apoyar al Gobierno ante los "embates" de la oposición
Los sacerdotes emitieron un duro documento en el que advierten que sectores de la oposición nucleados en Juntos por el Cambio, en base "al odio y la mentira", apuntan "a minar la autoridad política y moral" del Gobierno nacional
En un duro documento dado a conocer hoy, el Grupo de Curas en la Opción por los Pobres, salió a apoyar al Gobierno nacional ante lo que consideraron como "embates irresponsables y disolventes surgidos desde sectores importantes de la oposición" que apuntan "a minar la autoridad política y moral de aquellos sobre quien recae la responsabilidad de gobernar y guiar al país en estos momentos de enormes dificultades sanitarias, económicas y sociales".
Desde hace meses "hemos tenido que asistir (y soportar) impávidos a peligrosas argumentaciones anticuarentena, llamamientos a concentraciones que ponen en riesgo la salud de los asistentes (llevando probablemente al contagio y la muerte a un participante y activo convocante de esas protestas), invitaciones a armarse, amenazas de separatismos provinciales y otra larga colección de etcéteras: todo fundándose en la tergiversación de la verdad y mentiras lisas y llanas", señala el texto emitido por el Secretariado de ese movimiento religioso
"Pero el despreciable comunicado de la dirección de Juntos por el Cambio con ocasión del asesinato de Fabián Gutiérrez ha llevado la paciencia ética de la sociedad al límite de lo tolerable", afirma el documento, el cual advierte que "la supuesta 'extrema gravedad institucional' que adjudican al desgraciado acontecimiento, vuelve a revelar la 'extrema inmoralidad'" y la "la catadura ética de personajes que bien conocemos", a los que "parece no importarles hundir a la misma patria, con tal de que fracase el actual gobierno."
El Grupo de sacerdotes que integran entre otros, Eduardo de la Serna y Francisco "Paco" Oliveira, considera además, que "cuando la inmoralidad se enseñorea de la política, se disuelven las bases de la convivencia y la cohesión social" y dicen estar "convencidos de que es precisamente esa disolución lo que estos 'dirigentes', verdaderos agentes del mal, se han propuesto como finalidad: imposibilitar el diálogo y la búsqueda de los consensos necesarios para atravesar la crisis que atraviesa nuestra patria y de la que en buena medida han sido responsables".
El documento refiere finalmente, que "como cristianos y sacerdotes nos obliga el Evangelio; como ciudadanos (y a todos los ciudadanos) nos obligan la Verdad y la Justicia, la Paz y la Solidaridad" por lo que "no podemos sino expresar nuestro repudio y desprecio de este modo de obrar", tras lo cual hicieron "un llamamiento a la sociedad entera, independientemente de sus simpatías políticas, a demostrar que no estamos dispuestos a dejarnos dirigir por el odio y la mentira".