Gritos e interrupciones en el Congreso en la apertura de sesiones ordinarias
La titular del Senado, Cristina Fernández, estuvo sin tapaboca durante toda la sesión. El diputado macrista Fernando Iglesias le gritó: ""¡Acá se respeta la ley, pongase el barbijo!". Un rato después, el legislador se cruzó directamente con el presidente Alberto Fernández, quien ante las reiteradas interrupciones le espetó: "Tuvo cuatro años para hablar. ¿Por qué no me deja hablar a mí, por favor?".

Por Gabriela Vulcano
En un subibaja de aplausos y griteríos, el oficialismo y la oposición midieron fuerzas durante la inauguración de las sesiones ordinarias. El ala "dura" de Juntos por el Cambio apostó a ir de lleno contra el presidente Alberto Fernández por el desmanejo del Gobierno en el plan de vacunación, que dejó a la vista la lista de privilegiados para recibir la Sputnik V. Los legisladores del Frente de Todos apostados en el recinto, algunos ministros desde los balcones y hasta el propio jefe de Estado se encargaron de responder los cuestionamientos.
Los "Halcones" de Juntos por el Cambio contra los Fernández
Apenas la vicepresidenta, Cristina Fernández, atravesó el telón para ingresar al hemiciclo de la Cámara de Diputados se encendieron las críticas de la oposición. "¡Acá se respeta la ley, pongase el barbijo!", gritó desde la fila del fondo el diputado macrista Fernando Iglesias a la titular del Senado, que estaba con el rostro totalmente despejado. A cinco bancas de distancia estaba su compañero de bloque Waldo Wolff, que permaneció sin tapaboca durante las casi dos horas que duró la sesión.
La diputada de la Coalición Cívica Mónica Frade exhibía en el asiento lindero al suyo un traje y gorro a rayas de presidiario, junto a una careta del gobernador de Formosa, Gildo Insfrán. Días atrás, la legisladora opositora -que varias veces alentó el consumo de dióxido de cloro contra el Covid-19- viajó a la ciudad formoseña de Clorinda para denunciar supuestas violaciones a los derechos humanos en los centros de aislamiento de esa provincia.
"Repudio al vacunatorio VIP. Vacunas para todos y todas", decía el cartel que mostraba el diputado de Izquierda Socialista Juan Carlos Giordano. Cuando llegó el momento en que el presidente se refirió al escándalo de los vacunados privilegiados, que derivó en una crisis interna en el Gobierno, Iglesias volvió a poner en alto su vozarrón. Rápido, se sumó Wolff con fuertes reproches por las irregularidades en el sistema de vacunación.
"Sobre esto deseo ser claro: no llegué a la presidencia para ser sordo a las críticas bien intencionadas. Como tampoco llegué a la presidencia para dejarme aturdir por críticas maliciosas que responden a intereses inconfesables de poderes económicos concentrados, que en ocasiones buscan sembrar la fractura, la polarización y discordia entre el Pueblo Argentino", subrayó el mandatario como respuesta al griterío que se escuchaba de fondo. "¡Shhhh!", soltaron desde el bloque oficialista para intentar acallar los señalamientos opositores. El jefe del interbloque de Juntos por el Cambio, Mario Negri; y el titular de la bancada de PRO, Cristian Ritondo, eligieron guardar las formas.
La respuesta del presidente a los gritos de Fernando Iglesias
"Tuvo cuatro años para hablar. ¿Por qué no me deja hablar a mí, por favor?", dijo Alberto Fernández, apartándose de la letra del discurso, en respuesta a Iglesias, que no dudó en bajarse el barbijo para espetar una nueva crítica al Gobierno. Al igual que los gobernadores y una parte de los diputados y senadores, en una de las pantallas se veía a la flamante ministra de Salud, Carla Vizzotti, quien participó de manera remota debido a que el fin de semana le detectaron que tenía Covid-19.
Para entonces, la tensión era más que evidente. No sólo el presidente se mostró molesto por la seguidilla de interrupciones, sino también desde los palcos los integrantes del Gabinete exhibieron su desagrado. El ministro de Obras Públicas, Gabriel Katopodis, fue uno de los más eufóricos ante cada anuncios del presidente. También la titular del Consejo Nacional de Coordinación de Políticas Sociales, Victoria Tolosa Paz, que estaba sentada junto al secretario de Relaciones Parlamentarias, Fernando "Chino" Navarro.
Los abucheos volvieron a sonar cuando el mandatario anunció que instruyó "a las autoridades pertinentes para que formalmente inicien una querella criminal tendiente a determinar quienes han sido los autores y partícipes de la mayor administración fraudulenta y de la mayor malversación de caudales que nuestra memoria registra". Algunos en Juntos por el Cambio leyeron esas palabras como un golpe directo al ex presidente Mauricio Macri, no así a toda la coalición opositora, nada más ni nada menos que en el contexto de un año electoral.