Elecciones 2021: Cambio de estrategia tras el escándalo del cumpleaños en Olivos
El Gobierno busca eludir un daño electoral ante la publicación de las fotos y los videos del festejo en la quinta presidencial durante la cuarentena.
El Frente de Todos espera revertir la mala impresión que generó en el electorado el conocimiento de que se realizó un festejo de cumpleaños de la Primera Dama, Fabiola Yañez, durante la cuarentena el año pasado.
La Casa Rosada analiza los daños que puedo haber generado este escándalo que involucra al presidente Alberto Fernández y a su entorno más cercano. La primera reacción fue reconocer las visitas de personalidades a la Quinta de Olivos en 2020 cuando se había decretado un aislamiento estricto.
“Tenía que seguir gobernando a un país. Tenía que seguir trabajando. ¿Qué querían que haga, que me quede de brazos cruzados?”, había dicho Alberto Fernández cuando se conoció que la actriz y conductora Florencia Peña se había reunido con él.
Los rumores hasta llegaron a vincularlo con la modelo Sofía Pacchi, asesora de Fabiola Yañez, al figurar en el registro de ingresos a la residencia presidencial durante la cuarentena. Algo que también tuvo que salir aclarar el propio jefe de Estado.

Una foto sacada el 14 de julio de 2020 cambió la suerte del Presidente cuando fue publicada por la periodista de La Nación+, Guadalupe Vázquez, novia del vocero presidencial, Juan Pablo Biondi. Las imágenes mostraron a Alberto y Fabiola celebrando en una cena con amigos sin distanciamiento social, y en plena cuarentena.
La respuesta oficial al cumpleaños de Fabiola
Al estallar el escándalo, el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, intentó reducir el daño al calificar como "un descuido" a una reunión que "no debió haber pasado". No fue suficiente la explicación oficial, mientras la oposición pensaba en avanzar en un juicio político contra el Presidente.
"Se cometió un error, pero aflora el oportunismo político", aclaró Cafiero sobre la foto difundida.
La estrategia, pensando en lo electoral, tuvo un giro rotundo con el pedido de disculpas de Alberto Fernández y la posterior aparición junto a la vicepresidenta, Cristina Kirchner, quien no hizo alusión directa a las fotos pero le pidió al Presidente que “ponga orden”.
La foto y la campaña se entrecruzaron. El Gobierno intentó dar vuelta la página rápidamente para evitar cualquier daño en el voto. El Presidente decidió no modificar nada de su agenda. Viajó a Misiones a presentar el relanzamiento del programa Previaje, estuvo en un acto en La Matanza y compartió dos actividades -martes y miércoles- junto a Cristina Kirchner.
La difusión ayer dos videos de la fiesta de cumpleaños en medios afines al Gobierno buscó evitar cualquier consecuencia política que perjudique al Frente de Todos en las elecciones. El Ejecutivo se anticipó ante la certeza de que las imágenes ya se habían filtrado, y fue difundido en la web de El Destape y en la TV pública.